11/08/2010

Cuento infatil Hansel y Gretel



Allá a lo lejos, en una choza próxima al bosque vivía un leñador con su esposa y sus dos hijos: Hansel y Gretel. El hombre era muy pobre. Tanto, que aún en las épocas en que ganaba más dinero apenas si alcanzaba para comer. Pero un buen día no les quedó ni una moneda para comprar comida ni un poquito de harina para hacer pan. "Nuestros hijos morirán de hambre", se lamentó el pobre esa noche. "Solo hay un remedio -dijo la mamá llorando-. Tenemos que dejarlos en el bosque, cerca del palacio del rey. Alguna persona de la corte los recogerá y cuidará". Hansel y Gretel, que no se habían podido dormir de hambre, oyeron la conversación. Gretel se echó a llorar, pero Hansel la consoló así: "No temas. Tengo un plan para encontrar el camino de regreso. Prefiero pasar hambre aquí a vivir con lujos entre desconocidos". Al día siguiente la mamá los despertó temprano. "Tenemos que ir al bosque a buscar frutas y huevos -les dijo-; de lo contrario, no tendremos que comer". Hansel, que había encontrado un trozo de pan duro en un rincón, se quedó un poco atrás para ir sembrando trocitos por el camino.

Cuando llegaron a un claro próximo al palacio, la mamá les pidió a los niños que descansaran mientras ella y su esposo buscaban algo para comer. Los muchachitos no tardaron en quedarse dormidos, pues habían madrugado y caminado mucho, y aprovechando eso, sus padres los dejaron. Los pobres niños estaban tan cansados y débiles que durmieron sin parar hasta el día siguiente, mientras los ángeles de la guarda velaban su sueño. Al despertar, lo primero que hizo Hansel fue buscar los trozos de pan para recorrer el camino de regreso; pero no pudo encontrar ni uno: los pájaros se los habían comido. Tanto buscar y buscar se fueron alejando del claro, y por fin comprendieron que estaban perdidos del todo. Anduvieron y anduvieron hasta que llegaron a otro claro. ¿A que no sabéis que vieron allí? Pues una casita toda hecha de galletitas y caramelos. Los pobres chicos, que estaban muertos de hambre, corrieron a arrancar trozos de cerca y de persianas, pero en ese momento apareció una anciana.

Con una sonrisa muy amable los invitó a pasar y les ofreció una espléndida comida. Hansel y Gretel comieron hasta hartarse. Luego la viejecita les preparó la cama y los arropó cariñosamente. Pero esa anciana que parecía tan buena era una bruja que quería hacerlos trabajar. Gretel tenía que cocinar y hacer toda la limpieza. Para Hansel la bruja tenía otros planes: ¡quería que tirara de su carro! Pero el niño estaba demasiado flaco y debilucho para semejante tarea, así que decidió encerrarlo en una jaula hasta que engordara. ¡Gretel no podía escapar y dejar a su hermanito encerrado!

Entretanto, el niño recibía tanta comida que, aunque había pasado siempre mucha hambre, no podía terminar todo lo que le llevaba. Como la bruja no veía más allá de su nariz, cuando se acercaba a la jaula de Hansel le pedía que sacara un dedo para saber si estaba engordando. Hansel ya se había dado cuenta de que la mujer estaba casi ciega, así que todos los días le extendía un huesito de pollo. "Todavía estás muy flaco -decía entonces la vieja-. ¡Esperaré unos días más!". Por fin, cansada de aguardar a que Hansel engordara, decidió atarlo al carro de cualquier manera. Los niños comprendieron que había llegado el momento de escapar. Como era día de amasar pan, la bruja había ordenado a Gretel que calentara bien el horno. Pero la niña había oído en su casa que las brujas se convierten en polvo cuando aspiran humo de tilo, de modo que preparó un gran fuego con esa madera. "Yo nunca he calentado un horno -dijo entonces a la bruja-. ¿Por que no miras el fuego y me dices si está bien?". "¡Sal de ahí, pedazo de tonta! -chilló la mujer-. ¡Yo misma lo vigilaré!". Y abrió la puerta de hierro para mirar.

En ese instante salió una bocanada de humo y la bruja se deshizo. Solo quedaron un puñado de polvo y un manojo de llaves. Gretel recogió las llaves y corrió a liberar a su hermanito. Antes de huir de la casa, los dos niños buscaron comida para el viaje. Pero, cual sería su sorpresa cuando encontraron montones de cofres con oro y piedras preciosas! Recogieron todo lo que pudieron y huyeron rápidamente.

Tras mucho andar llegaron a un enorme lago y se sentaron tristes junto al agua, mirando la otra orilla. ¡Estaba tan lejos! “¿Queréis que os cruce?”, preguntó de pronto una voz entre los juncos. Era un enorme cisne blanco, que en un santiamén los dejó en la otra orilla. ¿Y adivinen quien estaba cortando leña justamente en ese lugar? ¡El papá de los chicos! Sí, el papá que lloró de alegría al verlos sanos y salvos. Después de los abrazos y los besos, Hansel y Gretel le mostraron las riquezas que traían, y tras agradecer al cisne su oportuna ayuda, corrieron todos a reunirse con la mama

Cuento El patito Feo



En una hermosa mañana primaveral, una hermosa y fuerte pata empollaba sus huevos y mientras lo hacía, pensaba en los hijitos fuertes y preciosos que pronto iba a tener. De pronto, empezaron a abrirse los cascarones. A cada cabeza que asomaba, el corazón le latía con fuerza. Los patitos empezaron a esponjarse mientras piaban a coro. La madre los miraba eran todos tan hermosos, únicamente habrá uno, el último, que resultaba algo raro, como más gordo y feo que los demás. Poco a poco, los patos fueron creciendo y aprendiendo a buscar entre las hierbas los más gordos gusanos, y a nadar y bucear en el agua. Cada día se les veía más bonitos. Únicamente aquel que nació el último iba cada día más largo de cuello y más gordo de cuerpo.... La madre pata estaba preocupada y triste ya que todo el mundo que pasaba por el lado del pato lo miraba con rareza. Poco a poco el vecindario lo empezó a llamar el "patito feo" y hasta sus mismos hermanos lo despreciaban porque lo veían diferente a ellos.

El patito se sentía muy desgraciado y muy sólo y decidió irse de allí. Cuando todos fueron a dormir, él se escondió entre unos juncos, y así emprendió un largo camino hasta que, de pronto, vio un molino y una hermosa joven echando trigo a las gallinas. Él se acercó con recelo y al ver que todos callaban decidió quedarse allí a vivir. Pero al poco tiempo todos empezaron a llamarle "patito feo", "pato gordo"..., e incluso el gallo lo maltrataba. Una noche escuchó a los dueños del molino decir: "Ese pato está demasiado gordo; lo vamos a tener que asar". El pato enmudeció de miedo y decidió que esa noche huiría de allí. Durante todo el invierno estuvo deambulando de un sitio para otro sin encontrar donde vivir, ni con quién. Cuando llegó por fin la primavera, el pato salió de su cobijo para pasear. De pronto, vio a unos hermosos cisnes blancos, de cuello largo, y el patito decidió acercarse a ellos. Los cisnes al verlo se alegraron y el pato se quedó un poco asombrado, ya que nadie nunca se había alegrado de verlo. Todos los cisnes lo rodearon y lo aceptaron desde un primer momento. Él no sabía que le estaba pasando: de pronto, miró al agua del lago y fue así como al ver su sombra descubrió que era un precioso cisne más. Desde entonces vivió feliz y muy querido con su nueva familia.

FIN


Cuentos Infantiles clasicos

Caperusita roja

Había una vez una niña llamada Caperucita Roja, ya que su abuelita le regaló una caperuza roja. Un día, la mamá de Caperucita la mandó a casa de su abuelita, estaba enferma, para que le llevara en una cesta pan, chocolate, azúcar y dulces. Su mamá le dijo: "no te apartes del camino de siempre, ya que en el bosque hay lobos".

Caperucita iba cantando por el camino que su mamá le había dicho y , de repente, se encontró con el lobo y le dijo: "Caperucita, Caperucita, ¿dónde vas?". "A casa de mi abuelita a llevarle pan, chocolate, azúcar y dulces". "¡Vamos a hacer una carrera! Te dejaré a ti el camino más corto y yo el más largo para darte ventaja." Caperucita aceptó pero ella no sabía que el lobo la había engañado. El lobo llegó antes y se comió a la abuelita.

Cuando ésta llegó, llamó a la puerta: "¿Quién es?", dijo el lobo vestido de abuelita. "Soy yo", dijo Caperucita. "Pasa, pasa nietecita". "Abuelita, qué ojos más grandes tienes", dijo la niña extrañada. "Son para verte mejor". "Abuelita, abuelita, qué orejas tan grandes tienes". "Son para oírte mejor". "Y qué nariz tan grande tienes". "Es para olerte mejor". "Y qué boca tan grande tienes". "¡Es para comerte mejor!".

Caperucita empezó a correr por toda la habitación y el lobo tras ella. Pasaban por allí unos cazadores y al escuchar los gritos se acercaron con sus escopetas. Al ver al lobo le dispararon y sacaron a la abuelita de la barriga del lobo. Así que Caperucita después de este susto no volvió a desobedecer a su mamá. Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Chiste Infantil El vendedor

Un niño entra a una óptica y le dice al vendedor:
- Quiero comprar una gafas, por favor.

El vendedor le pregunta:
- ¿Para el sol?

Y el niño responde:
                             - No. ¡Para mí!

Chistes Infantiles

Reírse es buenísimo! El mejor remedio para animarse, y que no presenta contraindicaciones. Y si la risa es buena, nada mejor que compartirla con los demá niños.
Los chistes estimulan el buen humor de los niños, fomentan la risa, desarrollan su vocabulario, y nos divierten. Provocan buenas y grandes sonrisas en los niños. Normalmente cuando los niños ingresan en el curso de Escolar, a partir de los 6 años de edad, suelen aprender algunos chistes a través de los libros y de intercambios con sus compañeros de colegio.

Así que no nos pierdas más tiempo y cuenten un chiste a los niños. ¡Seguro que los vas a ser  reír un montón!

11/07/2010

Canción Infantil karaoke

canción infantil sol

Canción Infantil Un elefante

Un elefante se balanceaba
sobre la tela de una araña
Como veía que no se caía
fue a buscar otro elefante.

Dos elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña
Como veían que no se caían
Fueron a buscar otro elefante

Tres elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña
Como veían que no se caían
fueron a buscar otro elefante,
etc, etc.......

Canción infantil El patio de mi casa

El patio de mi casa
es particular.
Cuando llueve se moja
como los demás. Agáchate,
y vuélvete a agachar,
que los agachaditos
no saben bailar.

Hache, I jota, ka
ele, elle, eme, a,
que si tú no me quieres
otro amante me querrá.

Hache, I jota, ka
ele, elle, eme, o,
que si tú no me quieres
otro amante tendré yo.

Si vienes a este corro
   aprende a cantar.
Correrás si yo corro,
como los demás.

Levántate
y vuelve a levantar,
que los levantaditos
si saben bailar

Canciones Infantiles

Abuelito dime tu



que sonidos son los que oigo yo.
Abuelito dime tu
porque en las nubes voy.

Dime porque huele el aire así
dime porque yo soy tan feliz.
Abuelitooo nunca yo de tí me alejareee

Abuelito dime tu
lo que dice el viento en su canción
abuelito dime tu
porque llovió porque nevó

Dime porque huele el aire así
                                                   dime porque yo soy tan feliz
                                                  Abuelitooo nunca yo de tí me alejareee

Poesía Infantil

El aseo
"Mi cuerpo yo cuido
con mucho interés
mi cara me lavo
y lavo mis pies.
Me baño y me ducho
¡mejor al revés!
Me ducho y me baño
me peino después.
Cepillo mis dientes
después de comer
y siempre mis manos
limpias y aseadas
procuro tener"

Poesíá Infantil



        Besos
Hay besos de caramelo,
dulces como una sonrisa.
Están los besos con prisa,
que hay que cogerlos al vuelo.

Los besos de mariposa
rozándote las mejillas
¡pueden hacerte cosquillas!
                                                   y son de color de rosa.

                                                             El beso con achuchón,                                                            ¿Y qué tal el beso alado
                                                             También está el de tornillo,
                                                  O los besos con caricia,
                                                   que llegan en ventolera
                                                    y huelen a primavera
                                                    como una buena noticia.

                                                              Fantástico el beso-guiño.
                                                  Es chisposo y titilante
                                                 como una estrella brillante
                                                 con mil vatios de cariño.
                                                  beso que mágicamente
                                                  despertó a Bella Durmiente
                                                  e hizo temblar el castillo.
                                                que te pilla de sorpresa,
                                                 y, además, el que te besa
                                                 puede estar en cualquier lado?
                                                tan calentito y tan tierno
                                                como una manta en invierno,
                                                ¡es un beso de algodón!

Poesía infantil

Abrazos


Acaba de abrirse el plazo:
desde hoy se regala afecto.
Para el que quiera un abrazo,
este es el bazar perfecto.

Se reparten cada día
mil caricias, atenciones,
alguna zalamería
y montones de achuchones.

Con sólo entrar por la puerta,
oirás palabras bonitas,
que están desde ayer de oferta,
y hay ternezas gratuitas.

Nos queda una cucamona
¡Ven a vernos cuanto antes!
El cariño se amontona
                                                         encima de los estantes.

                                                Ayer llegaron dos sacos
                                                -los guardo en el almacén-
                                                 rebosantes de arrumacos.
                                                ¿Besos y roces? ¡También!

                                               Valen todas las divisas
                                               que el producto es regalado.
                                               Cambio mimos por sonrisas
                                               y hay amor garantizado.
          

11/05/2010

Poesía Infantil

Poesías Infantiles

Rimas Infantil

Un marinerito
Me mandó un papel
En el que decía
Que me case con él
Yo le respondí que me casaría
Pero no con él.

Rimas Infantiles

Melindrosa

De tal condición
Que le dio un insulto
Al ver un ratón
 
Al estar cosiendo
En el pasadizo
Con el aire el hilo
Le dio un romadizo
 
Al tomar un libro
Se le cayó una hoja
Le pegó en el pie
Y la dejó coja
 
                                                      Ella está en la cama
                                                      Muy de gravedad
                                                       Por haberse puesto
                                                      Un botín helado
 
                                                     Ella sigue enferma
                                                      De muchos días
                                                    Por haberse puesto
                                                     La sortija fría

Ejemplo de Rimas Infantiles

El gato sin botas
De puro goloso
Amaneció enfermo
De un mal doloroso
 
La gata afligida
No duda el motivo
De alguna comida
O de un salto furtivo
 
El gato asustado
Confiesa su culpa
Devoró confiado
                                                                     Cinco ratas juntas

Rimas Infantiles

   Las rimas tienen que ver con la estimulación de los adultos a sus representantes infantiles, para que desarrollen la inteligencia (para el varón) a la vez que la elegancia (para la niña). El ingenio que presenta una rima infantil está en directa proporción con el interés de un pueblo por su infancia y de una familia por su niño.                                                      

Sugerencias para leerle el cuento al niño (a)


Háblele sobre temas que le interesen.
· Enséñele a cómo saber cuándo es su turno para hablar y cuándo debe escuchar.
· Cuando interrumpa una conversación en casa, corríjalo.
· Enséñele a esperar su turno.
· Realicen juegos como: Salir al parque para ver cuantos sonidos diferentes pueden identificar. (Pájaros, carros, perros, niños, etc.)
· Nómbrele  5 objetos y después pídale que los repita.
· Juegue “Simón Dice”.
· Haga preguntas acerca de una historia leída.
· Déle una lista de tres cosas que debe hallar. Cuando sea capaz de hacerlo, entonces déle una lista con cuatro cosas (y así sucesivamente
).

La importancia de Escuchar con Atención


 Escuchar, hablar, leer son destrezas fundamentales para lograr competencia comunicativa y ser comunicadores eficientes. Sin embargo, suele no darse la importancia  debida a la habilidad de escuchar, a pesar de que gran parte de la información de nuestro entorno es recepcionada por esta vía.

Escuchar implica oír y comprender lo que se dice. Oír es sólo percibir las palabras sin darnos cuenta de lo que significan. Comprender es interpretar adecuadamente o darle significado correcto a lo que se oye. Para comprender lo que se oye es indispensable atender a lo que se dice.

Es muy importante tener en cuenta que esta habilidad, que es esencial para el desarrollo integral de nuestros niños y para su aprendizaje, no es un Don natural, si no que es una habilidad que debemos fomentar.

11/02/2010

otros metodo par insentivar los niño la lectura contarle poemas religiosos

asi deveriamos leerle el cuento a los niños para que le sea mas entretenido al escucharnos

Margarita

El patito feo

Hansel y Gretel (Cuentos Clásicos)

BLANCA NIEVES Y LOS SIETE ENANITOS

Que cuento se le puede leer a un niño(a)

por ejemplo : Caperusita roja

Beneficio de los cuentos

- Los cuentos enriquecen la vida interna de los niños estimulando la imaginación, lo que les ayuda a desarrollar su inteligencia.
- Generalmente proporcionan seguridad a los niños, les dan esperanzas sobre un final feliz y les hacen pensar que cualquier conflicto o problema puede tener solución. Por eso, especialmente en los niños más pequeños, no son recomendables los cuentos que no tengan un final feliz.
- Los cuentos también transmiten valores a los niños y hacen que estos expresen sentimientos como la lealtad, el amor, la valentía, etc.
- También podemos apuntar que los cuentos pueden ser un prólogo perfecto para iniciar al niño en el mundo de la literatura, el interés por los cuentos se convertirá más tarde en un interés por la lectura y los libros en general, lo que supondrá en nuestro hijo numerosos beneficios, como una mayor facilidad para el estudio o un enriquecimiento cultural.
Finalmente podemos decir que contar cuentos a los hijos favorece la comunicación entre padres e hijos y, por regla general, aumenta y mejora la relación entre ellos.

como contarle un cuento a un niño

 Contarle un cuento suele ser más atractivo para el niño que leérselo.
Cualquiera de nosotros puede ser un magnífico narrador de cuentos en potencia. Sólo tenemos que dar rienda suelta a nuestra imaginación pero, para que logremos apasionar con nuestra narración a nuestros interlocutores, tenemos que tener en cuenta algunos requisitos:
- En primer lugar debemos mostrar interés en la narración y conseguir transmitir este interés al niño. Contar un cuento no puede convertirse en una tarea rutinaria y fastidiosa que debemos realizar para acostar a los niños después de un duro día de trabajo. El niño notará esta circunstancia y el cuento perderá toda su magia.
- Es imprescindible también conocer bien el cuento para poder contarlo adecuadamente. En ocasiones, es beneficioso que leamos nuevos cuentos o releamos cuentos conocidos.
- Debemos utilizar un lenguaje adecuado a la edad del niño que escucha nuestra narración. Para los niños muy pequeños, intentaremos utilizar un lenguaje claro y conciso evitando palabras complicadas y descripciones muy detalladas. Conviene hacer un especial hincapié en la entonación y modulación de la voz. Conforme la edad del niño avanza, podemos introducir palabras menos conocidas que enriquezcan su vocabulario.
- A la hora de contar un cuento es fundamental conocer al oyente para acertar. Así, adecuaremos tanto el tipo de cuento como la manera de contarlo a la manera de ser del niño. Si observamos que el niño siente temor o angustia, debemos cambiar el contenido del cuento. Si conocemos al niño, sabremos que cuentos son los más adecuados para él.

cómo motivar al niño a leer

No resulta difícil motivar a los niños para que disfruten de la lectura infantil y es algo que los padres debemos promover por todos los beneficios que ello conlleva. Con la lectura infantil los niños potencian su nivel intelectual, su imaginación, aumentan su léxico y las formas de expresión y sobre todo, pueden disfrutar del aspecto lúdico que ofrece la lectura infantil.
Para que un niño se sienta motivado a leer el comportamiento de los padres es fundamental, nada mejor que dar ejemplo. De hecho es uno de los principales factores que pueden hacer que un niño se introduzca en la lectura así que hay que seguir unas reglas y pautas de comportamiento que conquistarán a los niños para adentrarse en el mundo de los libros

Es necesario que los padres dispongamos de tiempo y leamos junto a nuestros hijos, la razón es que muchos niños leen con mayor facilidad y comodidad cundo se encuentran junto a sus padres. El inconveniente en este caso puede ser la falta de tiempo por cuestiones laborales, pero si existe el deseo de potenciar la lectura infantil es necesario buscar un hueco y dedicarlo a la lectura de los primeros cuentos
infantiles junto a los niños.
Leer en casa es muy gratificante por la comodidad y la calidez que proporciona el hogar, sin embargo, la carencia de libros infantiles es la tónica habitual, son los juguetes los que predominan entre las pertenencias del niño.

Lo que no funciona en la lectura

A la hora de incentivar la lectura es contraproducente utilizar el libro como castigo o como amenaza, principalmente desde el ámbito familiar, y tampoco es bueno incentivar la lectura a partir de un solo tipo de texto, "es necesario que los niños se enfrenten a una diversidad de textos, que les permitan ampliar sus mundos, entretenerse, informarse, poder tomar decisiones, descubrir, imaginar y reflexionar".

Algunos intentos por lograr que los niños lean más surten el efecto contrario, es decir, generan mayor resistencia a la lectura:

- Sobornar: Si bien no hay nada de malo en premiar los esfuerzos del niño por leer, no será bueno que el pequeño espere un regalo cada vez que termina un libro. Cuando sea posible, ofrécele otro libro o revista (lo que él o ella decida) junto con palabras de elogio. También se puden dar otras recompensas simbólicas, pero ofrécelas con menor frecuencia cada vez. Con el tiempo, el niño verá en el hecho de leer un beneficio intrínseco, independiente de la recompenza.

- Juzgar el desempeño del niño: Se recomienda separa el desempeño del niño en el colegio o sus notas del leer por placer. Ayuda el niño a disfrutar un libro es más importante a largo plazo.

- Criticar las preferencias del niño: Leer casi cualquier cosa es mucho mejor que no leer del todo. Aún cuando consideres que tu hijo elige libros que son demasiado fáciles o que tratan temas de una manera muy liviana, esconde tu disconformidad. Leer cualquier tipo de textos es una práctica valorable porque crea auto-confianza y habilidades de lectura y lenguaje. Si te molesta lo que el niño lea simplemente por un asunto de gusto personal, respeta el derecho del niño de tener sus propias preferencias.

- Poner metas inalcanzables: Busca mínimas señales de progreso antes que cambios dramáticos en los hábitos de lectura del niño. No se puede esperar que un niño que ha sido mal lector termine un libro en una noche, pero continúa animándolo.

- Hacer un gran asunto de la lectura: No conviertas el tema de la lectura en una campaña. Bajo presión, el niño leerá sólo para complacer a los padres más que por sí mismo, o se revelarán y no querrán leer ni una línea.

¿Por qué a algunos niños no les gusta leer?

                                                        Alguna de estas frases tienen un
 tono familiar? Son las razones que los niños generalmente dan como motivo para no leer:
- Es aburrido: No es para desesperarse si el niño piensa así ante los libros que son asignados por el jardin. Los padres pueden entregar a los niños otras clases de lecturas que tengan más que ver con los intereses del niño.

- Es muy difícil: Para algunos, leer es un proceso lento y tortuoso. Si el niño tiene problemas con la lectura, hablar con sus padres, decirle cómo pueden encontrar libros interesantes y material escrito acorde con el nivel del niño.

No es importante. Es muy común que los niños no aprecien cómo la lectura puede ser relevante en sus vidas. Los padres pueden buscar por su cuenta libros o material escrito que crean llamarán la atención de sus hijos.

- No es entretenido. Sobre todo los niños que les cuesta más leer, pueden sentir ansiedad cuando tienen que hacerlo. E incluso niños con buenas habilidades de lectura, pueden sentir esa ansiedad, producto de la presión del colegio o jardin y de la casa que enfatiza el leer para la nota.

¿Que es la lectura infantil ?

, lejos lo más efectivo para convertirlos en buenos lectores en el futuro es leerles en voz alta, y cuanto antes se comience con esta sana rutina, mejor. Hasta un bebé de pocos meses puede ver las ilustraciones, escuchar la voz de quien le lee y cambiar las páginas (cuando son duras).Es hablar de bebés,preescolares y la lectura
  Esto es que de tanto escuchar un texto se lo aprenden de memoria y luego con el libro en la mano, sin saber leer, son capaces de pasar las hojas, repitiendo el texto. "Esta es una actividad que motiva el interés por aprender a leer y hacerlo bien". Haga de este tiempo de lectura algo especial, cargando al bebé y evitando distracciones como la televisión. Y cuando el niño ya sabe leer, la rutina de lectura en voz alta debe continuar, si bien se puede pedir que algunas partes las lea el niño.
Simplemente el tener libros, diarios y revistas en la casa ayudará al niño a sentirlos parte de su vida diaria.